
Contenido
- 1 Para progresar debes mejorar tu liderazgo religioso
- 1.1 Transformarse en un líder próspero no sucede de un día para otro.
- 1.2 Los líderes prósperos piensan a diario en las entradas y esporádicamente en las salidas.
- 1.3 Procura pensar en S.M.A.R.T.
- 1.3.1 ¿De qué manera es el amor de Dios?
- 1.3.2 Dios es leal… incluso cuando tú no lo eres
- 1.3.3 3 cosas que debemos creer en la Palabra de Dios
- 1.3.4 La belleza de la perseverancia bíblica
- 1.3.5 ¿Por qué murió Jesús en la cruz? 5 razones profundas
- 1.3.6 ¿Qué significa «Caminar por el espíritu»?
- 1.3.7 10 cosas que deberías saber sobre Charles Spurgeon
- 1.3.8 ¿De qué forma hacer la pastoral juvenil?
- 1.3.9 De qué manera comenzar a leer la Biblia: Una guía en profundidad
Para progresar debes mejorar tu liderazgo religioso
«Progresar»-verbo, que significa:
prosperar; ser agraciado o bien triunfante.
medrar o bien desarrollarse vigorosamente; florecer.
Como pastores y líderes del ministerio, todos deseamos mejorar. Deseamos ver a nuestros ministerios medrar y lograr el éxito, mas asimismo deseamos desarrollar y florecer en nuestro liderazgo religioso.
Transformarse en un líder próspero no sucede de un día para otro.
Bajo cualquier circunstancia normal, se precisa intencionalidad y compromiso para comenzar a sentir que estamos prosperando de veras. Mas una cosa que todos aprendemos en esta temporada es lo veloz que pueden mudar las cosas. Nuestra definición de éxito ha alterado y nuestros objetivos han alterado con él.
Entonces, ¿de qué forma podemos verdaderamente comenzar a progresar como pastores y líderes del ministerio en esta temporada? Aquí existen algunos pensamientos sobre lo que semeja mejorar en su liderazgo religioso.
Los líderes prósperos piensan a diario en las entradas y esporádicamente en las salidas.
Siempre y en toda circunstancia es una gran idea escoger el juego largo en vez del corto. Esto significa hacer las cosas simples todos y cada uno de los días que amontonarán intereses y se van a pagar en el futuro.
Ser obediente a las labores al día, supuestamente mundanas, va a ayudar a crear impulso y robustecer los músculos de nuestro ministerio. Son estas entradas cada día las que van a crear los resultados que deseamos ver después. Concentrarse en las cosas que podemos medir, como los cuerpos en los asientos o bien el número de bautismos, no va a ayudar a conseguir nuestros objetivos. Estos resultados medibles proceden de entradas intencionales y hábitos hechos consistentemente alrededor de un buen liderazgo religioso.
Lo mismo ocurre con las relaciones en nuestros ministerios. Así sea con los miembros del personal o bien los voluntarios, son los aportes diarios que invertimos en las relaciones a nuestro alrededor los que van a dar poder a la gente.
Si deseamos generar líderes en nuestras organizaciones, debemos rememorar que debemos enfocarnos más en de qué forma estamos invirtiendo en nuestra gente, no en quién aguardamos que se transformen.
Cada uno de ellos medra a su ritmo, y se precisa paciencia y consistencia para desarrollar líderes y acólitos prósperos.
¿Mas qué hay de los objetivos? ¿De qué manera podemos fijarlos si nos centramos a propósito en las aportaciones?
Craig Groeschel habla sobre los objetivos de entrada al comienzo de su episodio de podcast, Embracing Change: Parte 1. Nos recuerda que como líderes, podemos supervisar la entrada, mas no podemos supervisar el resultado. De ahí que debemos asegurarnos de que estamos estableciendo el género de objetivos adecuados.
Los objetivos de entrada son objetivos basados en lo que podemos supervisar – estos son objetivos basados en el ahínco y la inversión que ponemos.
Estas metas están informadas por el resultado deseado o bien el resultado que deseamos conseguir, mas no están enfocadas en esos resultados. En su sitio, se centran en lo que haremos para llegar allá. Por servirnos de un ejemplo, si deseamos correr un maratón, nuestros objetivos de entrada pueden ser sencillamente correr a lo largo de treinta minutos al día.
Progresar como ministerio o bien como pastor siempre y en toda circunstancia es asequible mediante un buen liderazgo religioso, sin importar lo más mínimo la época. Así sea en la mitad de una pandemia nacional o bien en una temporada de reavivamiento, podemos realmente progresar si sostenemos nuestro enfoque diario en las entradas y esporádicamente en las salidas.
Entonces, ¿de qué manera podemos comenzar a meditar en las entradas cada día y establecer objetivos de entrada?
Procura pensar en S.M.A.R.T.
Para potenciar tu liderazgo religioso establece metas de entrada siguiendo el modelo S.M.A.R.T:
ESPECÍFICOS- Establecer objetivos concretos trae claridad y comprensión compartido de lo que significa el propósito.
MEDIBLE- Estos géneros de objetivos van a tener un número o bien porcentaje medible basado en los insumos, no en los resultados.
ORIENTADO A LA ACCIÓN- Sus objetivos deben asistirle a meditar en los pasos de acción que deberá dar para conseguir las habilidades o bien conocimientos precisos para asistir a lograr el resultado deseado.
REALISTA- Las metas siempre y en todo momento tienen el propósito de retarte y hacerte medrar, mas asimismo es esencial cerciorarte de que tus metas sean aún muy alcanzables a fin de que o bien tu ministerio las cumplan.
MARCO TIEMPO – Asegúrate de establecer una fecha de comienzo y una fecha de finalización que puedas tener delante de ti o bien de tu equipo para la rendición de cuentas».